lunes, 20 de abril de 2020

Un paso adelante y dos atrás

El ser humano lleva décadas buscando el test definitivo de inteligencia para medir diferentes parámetros. Sin embargo, ha hecho falta una pandemia global para que todos esos intentos queden en vano, pues, solo con observar alrededor se pueden detectar a todas las personas de coeficiente mental reducido o hablando en claro: a los gilipollas integrales.
Hay mucha gente que vale oro y que hace pequeños gestos que aunque no son valorados como se merecen, marcan la diferencia: ese vecino que hace la compra a las personas mayores de su bloque, esa persona que cuida a los hijos de los que tienen que seguir trabajando, esos empleados de supermercado que te sonríen y dan un trato educado (aunque estén muertos de miedo por dentro de si ese será el día en el que enfermen) o simplemente cualquiera de nosotros que guarda la distancia de seguridad y se desinfecta a menudo, que puede parecer lo más tonto del mundo, pero si yo no me contagio, ayudo a que la gente de mi entorno no lo haga.
A pesar de este gran paso adelante cada día creo que vamos dos hacia atrás. Estas son algunas de las observaciones que confirman mi teoría:
1.       El ser humano (y sobretodo el español) es un ser tramposo:  ya desde el primer día de confinamiento apareció gente paseando que decía: “uupps, yo pensaba que el confinamiento empezaba el lunes” y seguro que alguno usó la misma excusa una semana después diciendo que pensaba que empezaba el primer domingo de abril. Así como eso, tenemos a los paseadores de perros falsos, de gallos, aquel que se daba la vuelta al barrio con una barra de pan en mano, como si se tratara de una orden militar, o las personas que aprovechan y salen 7 veces por día a comprar y a pasear al perro.
2.       A día de hoy muchos llevan la mascarilla como complemento: si ya es malo salir sin mascarilla ni guantes (cosa que puedo medio entender ya que escasean gravemente), el hecho de tenerla y darle un mal uso es que hace que me hierva la sangre. Gente con la mascarilla en la calle que se la quita al entrar al mercado, los que se la ponen en la barbilla, los que dejan la nariz al aire, los que la manipulan por dentro y por fuera después de tocar de todo en la calle, los que se la ponen de sombrero (si te gusta travestirte de pirata lo haces en tu casa).
Uno de los ejemplos más claros lo vi hace días en un vídeo de un reportero de las noticias de Telecinco: al chico le habían mandado como corresponsal al hospital improvisado del IFEMA en Madrid, donde estaban usando una nueva herramienta para detectar posibles enfermos. Se trataba de una cámara que medía la temperatura corporal al pasar por su radio de acción y si superabas los 37, 5º C, ya no te dejaban salir. Obviamente, para demostrar su eficacia, el reportero pasó por delante de ella para mostrarnos su funcionamiento. Para su sorpresa, la mía y la de sus familiares, que imagino (y espero) que no le vieron regresar a casa, el chico marcó 38º C, a lo que respondió con un “es que me he puesto nervioso”. Ya…. Cuando vuelvas a casa pones una mascarilla en la chimenea para cuando venga Papa Noel, a ver si te crees que hemos nacido ayer. Y, ¿adivinan que es lo más divertido de todo esto?
Efectivamente, el chico llevaba una mascarilla…completamente bajada. Te vas a uno de los focos más infecciosos de Madrid con esa soberbia, pues así pasa. Y lo peor es que cosa que se ve por televisión es más susceptible de copiarse.
INCISO:  se le hicieron pruebas al día siguiente y tenía temperatura normal, parece ser que fue culpa de un foco, de todas formas, estoy seguro de que otro día conectarán con él y seguirá con la mascarilla quitada. Este susto debería servirle de aviso.
3.       Mucha gente está desesperada por volver a su vida normal: obviamente yo creo que todos, yo el primero, queremos que esto acabe y volver a nuestra rutina, a la seguridad de pasear, de saludar a alguien, de ir a un restaurante y estar tranquilos de que no pase nada. Mientras eso no pase, tocará estar encerrados o ir saliendo pero, con ciertas precauciones. En cambio, hay mucha gente que una vez se levante el confinamiento está deseosa de recuperar todos sus viejos hábitos y cito TODOS.
Hace una semana en un diario deportivo apareció una encuesta que preguntaba: “una vez se levante el confinamiento, ¿volverás a ir a los estadios?”
a)       Si, inmediatamente
b)      Solo si es con restricción de un tercio del aforo
c)       No, hasta que haya una vacuna
Increíblemente, un 25% respondió que volverían inmediatamente. Después de ver lo peligrosas que son las multitudes y de intuirse que, aunque acabe el confinamiento, el virus seguirá con nosotros y habrá que ser cautos, el 25% si mañana pudiese salir a la calle se metería en un estadio con 80000 personas, con lo que eso conllevaría…reiniciar el proceso y el colapso total.
4.       Televisiones compradas: hace como 10 días me parece, cuando el número de fallecidos bajó significativamente, creo que de unos 700 a 600, en el telediario de la noche, Matías Prats dijo algo así (no recuerdo las palabras exactas pero lo importante va en mayúsculas): “Abrimos con una buena noticia y es que el número de fallecidos hoy ha sido de SOLO 500”. A ver si lo entiendo, llevamos años preocupándonos por el lenguaje inclusivo que si ellos, ellas, elles, seres de luz y derivados, pero se habla de SOLO como si fuera algo sin importancia, seguro que los familiares de esas TANTÍSIMAS personas, porque 500 fallecidos en un día ES UN NÚMERO ENORME QUE NO MERECE SER MENOSPRECIADO BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA estaban revolviéndose en sus casas. Hoy en: “Aprende con Toni”, veremos otros ejemplos donde el “solo”, aunque está bien usado a nivel de construcción de frase no debe usarse ya que carece de sentido:
-          Un mileurista que tras un ERE en su empresa le dice a su mujer: “cariño buenas noticias no me han despedido SOLO me han quitado el 90% del sueldo”
Enhorabuena, tienes un trabajo…con el que se están riendo de ti y te vas a morir de hambre.
-          “Fue un crimen atroz, aunque no fue tan malo, SOLO le metieron 185 puñaladas”
Vamos, que igual si llegas antes se salva ¿no? En fin.
-          ¡Salta! SOLO hay una caída de 200 metros.
¿Qué son 200 metros para el ser humano promedio? Baaah, minucias.
-          Mira, este bolso está regalado, antes costaba 1 millón de euros, pero ahora SOLO cuesta 700000 euros (le dice la mujer de, por ejemplo, Cristiano Ronaldo a una vecina que viene de pedir ayuda en la parroquia).
Imagino que con esto habrá quedado claro.

Por otro lado, hace un par de días en Telecinco hablaron de un estudio que decía que si el confinamiento se hubiese hecho una semana después tendríamos medio millón de contagiados más, la mala noticia, una pequeña minucia sin importancia, es que si se hubiese hecho una semana antes tendríamos SOLO un 60% menos de contagiados.
Aquí sucede a la inversa, lo vendían como si fuera una glipollez, que el hecho de haberlo hecho una semana antes no habría cambiado nada. Cuando con un 60% menos, igual estaríamos hablando de que a día de hoy se habrían salvado 15000 personas, y eso es mucha felicidad para gente que ahora mismo lo estará pasando fatal.
A parte de esto ya ni mencionar que seguimos sin mascarillas, que no están haciendo test a nadie (salvo a Irene Montero, que ha debido de comprar la industria entera), que se cierran redes sociales de prestigio cuando crece el rechazo al gobierno, el hecho de vendernos solo lo bueno como que somos el país con más gente recuperada (siendo el país con más infectados en relación al número de habitantes del país, es lo más normal) y enmascarar lo demás, etc. Son cosas para estar muy enfadado y tener al menos la posibilidad de protestar.
5.       Hipocresía: cuando empezó el aplauso a sanitarios y demás personal que sigue al pie del cañón, yo pensaba que iba a ser cosa de un día, que iba a ser imposible en un país como este, en el que nos avergüenza escuchar el himno y que cuando ves un minuto de silencio en los estadios dura 30 o 45 segundos, que esto durase todo el mes. En cambio, así lo ha hecho, pero al igual que esos asesinos que siempre saludan a los vecinos de su bloque y que parecen muy majos, es todo fachada o al menos en ciertos casos. Esta semana se ha visto mucha gente que repudia con cartas anónimas, pintadas, etc, a todos estos profesionales para que abandonen sus domicilios y así no se contagien. Yo eso he podido verlo en tercera persona, pues la tía de mi novia es doctora y ha visto en su bloque gente en el tendedero comunitario charlando a la respectiva distancia de seguridad y en el momento que ella aparecía la gente no le daba ni los buenos días, agachaban la cabeza, le echaban una mirada de desprecio o se iban. No te digo que los abraces, les des dos besos o beses el suelo por el que pisan. Simplemente un “buenos días” con una sonrisa o un “¿cómo estás?” son suficiente. Fabrícate una mascarilla, mantén una adecuada distancia de seguridad y así podrás mantener la educación.
Por supuesto, esta gente estaba puntual a las 20:00 para aplaudir.


En fin, seguro que me dejo más cosas, pero estas son algunas de las más importantes que he vislumbrado a lo largo de este mes. Como siempre, desear lo mejor a vuestros seres queridos y que ojalá en breve podamos ir retomando la normalidad, aunque sea pasito a pasito.



martes, 10 de marzo de 2020

Frases mas enfermizas que el coronavirus

Al entrar al blog hoy comprobé que llevaba 16 meses sin publicar nada. Ya fuera por falta de tiempo,  por no encontrar un tema que me llamara lo suficiente o simplemente por desarrollar otros hobbies. Sin embargo, hay un tema que está en boca de todos y yo no quería ser menos.
No vengo a dar mi opinión y a imponerla como única y verdadera, ni a dar consejos de prevención o actuación, pues para ello hay gente con muchos más conocimientos que están ayudando mucho, lo que mencionemos el resto son solo habladurías de patio de vecinas con más o menos fundamento según a quien se escuche.
Hoy, como ya acostumbro otras veces, vengo a contar anécdotas que están dando de si el coronavirus, o más bien frases, frases que, metafóricamente ponen enfermo solo de oírlas.
Cierto es que no podemos renunciar a nuestra vida, encerrarnos en casa y rezar para que todo esto pase, y que a veces un poco de sentido del humor rebaja un poco la tensión y el clima de crispación, pero también es claro que hay una delgada línea entre hacer humor y tomarse las cosas a chiste. Sin más dilación dejo alguna de las perlas que he escuchado durante las últimas semanas:
Persona uno al escuchar que ahora que se estaban cerrando estadios y cancelando eventos igual se deberían cancelar las fallas:
“¡Si hombre! ¿qué dices?, cancelad vosotros vuestra puta mierda de San Isidro”
(obsérvese el amor incondicional que siente esta persona por Madrid y los madrileños)

Persona dos solventando el conflicto en un día:
“Esto es muy fácil, viendo que la mayoría de gente que muere son las personas mayores yo montaba un megaviaje del IMSERSO y me llevaba a todos los viejos a las palmas de Gran Canaria y viendo que el virus se muere con el calor en nada están todos curados, y si no pues al menos no se expande la epidemia por la península”
(que no tengamos por líder a un hombre así es un paso atrás para la humanidad, nótese la ironía)

“En mi familia nunca hemos sido muy de gripes, si acaso un poco de mareo y mocos como un simple constipado, así que esto no debe ser muy diferente”
Fulanito Pérez, doctorado en medicina por la Universidad de la Vida

Por mí, que siga esto así más tiempo no sabes que gozada como venían de vacías las carreteras por la mañana.
Vicente Diésel, Rápido…pero ya no tan furioso

“Vaya chollo esto del teletrabajo para los padres con hijos, estoy por adoptarme un crío”
Menganito de Tal. Soltero, sin hijos y nuevo nominado a padre del año

Estas dos fueron dichas por la misma persona:
“Corona virus, corona virus aja, ¡ostras aquí sí que viene una noticia importante! Nuevas ofertas en discos duros”
“Yo prefiero venir a trabajar que quedarme en casa, total si esta la oficina medio vacía aquí que vamos a pillar”
Intelecio Martinez. Dinero para discos duros, pero no para comprar una vida”

Si en Valencia la cosa está controlada, son 4 casos contados. El problema de las fallas va a ser los niñatos madrileños que aprovechando que no tienen clase y que sus padres no les soportan y no les quieren en casa van a venirse todos aquí a pegarse la borrachera padre y van a infectar al resto. Y si no que pongan metralletas y que no entre nadie de fuera”
Gandhicio Hernández. Premio Nobel de la paz 2020

“¿qué un bebé de 5 meses ha pillado el coronavirus? Naaa, si los niños son fuertes seguro que ni lo siente
Rambo Sánchez. Si no has estado en Vietnam no sabes lo que es el sufrimiento

“Te digo una cosa, cuanta más gente enferma mejor, así bajan el precio de los pisos y me compro una casa. Seguro que más de uno durante la Guerra Civil pensó igual”
Emilio Hitler. Especulador del sufrimiento ajeno

Esto fue una conversación en la que tuve que replicar:
-          “Pero de que os vais a preocupar, si se pilla pues ya está. Si la gente joven no se muere”
-          “Bueno, pero digo yo que, si lo cogemos los jóvenes y en ciertos casos no se muestran síntomas, igual se lo podemos pegar”.
-          “Bueno chico, pues no vayas a verlas en varias semanas, ya ves tú, que tampoco se van a morir”.
En este caso me abstengo de poner nada gracioso porque partiendo de que tengo 2 abuelas de más de 90 años y una de ellas necesita cuidados constantes después del ictus que sufrió hace varios años…. En fin.

Antes de acabar queda una sorpresa más que es lo que me ha hecho llegar a este estado de nervios del que casi exploto hoy. Allá va:
TODAS ESTAS FRASES EN VERDAD HAN SIDO DICHAS POR LA MISMA PERSONA EN EL TRANSCURSO DE UNA MAÑANA. ¡¡¡ TACHAAAAAN!!!

Pues si gente, en apenas unas horas un solo individuo ha dejado todas estas perlas. Como dije al inicio habrá gente más o menos de acuerdo, pues cada uno tenemos nuestra opinión y no tenemos la verdad absoluta, ni la vamos a tener. Porque, aunque alguien la tuviera en cuanto empezaran a circular por los medios de comunicación llegaría corrompida y contada de múltiples maneras.
Así que solo diré: cuidaos mucho y que si tenéis la mala suerte de pillar el coronavirus que no haya que lamentar ninguna perdida. Y si queréis el consuelo de una persona cariñosa y con empatía os paso el número del alma bondadosa en esta historia que como veis el bienestar global es su única meta.






domingo, 20 de octubre de 2019

La razón de todo



Empieza otro lunes, sábanas pegadas y ojos entrecerrados, pero hoy no es otro lunes cualquiera, hoy es 21 de octubre día especial donde los haya, por algo lo escogieron en Regreso al futuro para viajar al año 2015. Sin embargo, nuestra historia comenzó un año después haciendo que estudiaba en una biblioteca esperándote para decirte que me gustabas, que si era más payaso que de costumbre era por ti y por hacerte reír. Gracias a Dios me dijiste que sí y mi corazón volvió a su sitio.
Para ti era la primera relación seria y sé que ibas con cuidado con miedo a que te hicieran daño como ese pistacho herméticamente cerrado que nos sirvió de broma y mote los primeros meses, yo aunque más experimentado iba con pies de plomo rezando que las cosas no se torcieran, porque en mi credo estaba la norma no escrita de que si encuentras algo que te molesta levemente pasado el primer mes que te pueda darle vueltas cuando te vayas a dormir, seguramente en el futuro se magnificara y amenazará con romper la relación. En cambio, pasó ese primer mes, ese primer año y sigue pasando el tiempo y sigo durmiendo como un lirón, pudiendo tener otros problemas que me quiten el sueño, pero tú nunca lo eres, eres la razón de que tenga sueños mucho más bonitos. Y aunque alguna noche nos hayamos podido ir enfadados no faltará el mensaje de “te quiero” como aquella imagen que me encanta de los 2 viejitos.
Y sé que tengo mis momentos cascarrabias, pero ya sea con ayuda de esos peluches que tenemos como hijos o al estudiar con esas gomas de borrar con caras de misericordia me hago perdonar. Y es que no conozco otra forma de ser contigo que no sea la absurda, aunque gracias a ello también he conseguido que en tus días más grises olvidaras tus problemas y se te pasaran todos los males y acabaras con un: “no me caes bien”, ya que cuando tú haces lo mismo conmigo a mí me cuesta más volver a mi ser, pero sabes que luego a solas sonrío y doy mil gracias por tenerte ahí.
Nunca he sido perfecto ni voy a pretender serlo, por suerte veo que aún con mis defectos sigo pareciendo una persona soportable y tu… te limitas a decir que no quieres ser pesada ni que me canse de ti, pero eso me resulta imposible es como cansarse de respirar o decir que no a un plato de croquetas (¡QUIEN PUEDE DECIRLE NO A UN PLATO DE CROQUETAS! Sé que es un ejemplo tonto, pero me has entendido).  Y es que, aunque hemos pasado momentos muy buenos, también los hemos pasado peores, sé que este año empezó difícil con lo de tu operación y que muchos días estuviste maldiciendo la lentitud de la recuperación o en el inicio de la carrera, pero siempre que pude estuve ahí para que tuvieras otras cosas en las que pensar (que lejano se ve ahora y eso que apenas ha pasado un año) y tú también has estado para mi aguantando esos bajones existenciales en los que no sabía ni qué hacer con mi vida, siendo el remo que me reconducía buen puerto y porque no decirlo cuando me ponía demasiado extremista un golpe de autoridad con un discurso motivador para venirme arriba. O por seguir con la metáfora….


Golpe de remo (no podía faltar una referencia a los Simpsons y lo sabes)

Así que como en la película te propongo un viaje al futuro, a un futuro en el que ojalá sigamos juntos dentro de 50, 100 0 200 años (dependiendo de si se puede pasar mi conciencia y sabrosura a un robot bailongo) y todo siga igual. Que hayas cumplido todas tus metas y yo haya estado ahí el primero para levantarme y aplaudir, que me des en el brazo cuando veas un coche amarillo, que pongas voz tierna para convencerme de adoptar un cachorro,que te quejes por la raya del ojo, que apoyes tu cabeza en mi hombro y te quedes dormida (y que luego lo niegues), que seas esa persona humilde que se sorprende por cualquier detalle, que me eches de menos, aunque despertemos juntos cada mañana. En definitiva, que sigas siendo tú y que a nuestra manera tan especial sigamos disfrutando de nuestros momentos juntos y que queden muchas fotos, videos chorras y sobretodo recuerdos tan geniales como los ya vividos.
Felices 3 años
Te amo